En 2009 se hizo la primera observación electoral ciudadana en América Latina utilizando el mapeo de reportes cívicos como herramienta para recibir y visibilizar las denuncias y acontecimientos identificados por la ciudadanía. En ese entonces, “Cuidemos el Voto” llegó a tener poco más de 11,000 reportes ingresados a través de formularios web, SMS, Twitter y correos electrónicos que eran publicados a través de una de las primeras versiones de Ushahidi adaptadas al español.
En años posteriores, la observación electoral cívica asistida por plataformas para recibir, gestionar y visualizar reportes se utilizó para las principales elecciones en América Latina y gran parte del mundo. La ciudadanía conectada a Internet y telefonía móvil pudo ejercer su derecho a vigilar más allá de sólo participar como votante ampliando así la fuerza cívica para inhibir ciertos delitos electorales y enriqueciendo la experiencia cívica durante una elección.
Tres años después, el contexto tecnológico y electoral ha llegado a un punto en donde el reto no es tanto el buscar la vigilancia masiva de la ciudadanía, sino que ésta pueda ser validada y articulada con sustento jurídico suficiente para que existan canales de denuncia formales habilitados para la forma de vida digital de la actualidad. Este 2012, se dejó el nombre “Cuidemos el Voto” atrás para dar un paso significativo al institucionalizar el proceso de observación electoral bajo el aval e impulso del Fondo de Observación Electoral del PNUD.
La mayor premisa detrás de Observación Electoral 2012 es que la ciudadanía y organizaciones de la sociedad civil reciban, gestionen, visualicen y canalicen incidentes electorales a las autoridades correspondientes. En las semanas previas a la elección, el 2 de Julio y en los días posteriores se recibieron miles de reportes ciudadanos y después de moderarse con detenimiento, se publicaron poco más de 1,500 incidentes en la plataforma pública y 901 de ellos fueron canalizados a FEPADE que posteriormente asignó 716 incidentes al IFE. Ahora, la ciudadanía debe dar seguimiento a estas instituciones para conocer el desenlace de sus reportes. Aquí se encuentra el proceso diagramado y status de respuesta de FEPADE.
Tecnológicamente, Observación Electoral 2012, también es un parteaguas en materia de la observación electoral ciudadana. Por primera vez en la historia, se habilitó una plataforma que permite recibir y gestionar reportes por organización. Es decir, dentro de una sola plataforma, cada organización cuenta con una bandeja de entrada en donde ve y revisa los reportes enviados por su red de observación habilitando un mapa y estadísticas públicas que reúnen los reportes públicos de todas las organizaciones participantes.